El presidente Luis Abinader, acompañado por la vicepresidenta Raquel Peña y la primera dama Raquel Arbaje, celebró el Día Nacional de la Biblia en un acto celebrado en el Palacio Nacional, destacando la relevancia de la fe en la vida pública y social de la República Dominicana.
El Día Nacional de la Biblia en la República Dominicana se celebra cada 27 de septiembre, una fecha establecida por la Ley 204-84 con el propósito de honrar las Sagradas Escrituras y fomentar la reflexión sobre su impacto en la vida social y espiritual del país. Se considera relevante su influencia en la cultura, dado que es el único país del mundo que tiene la Biblia incorporada en esu bandera y escudo.
El acto se adelantó a su fecha oficial del 27 de septiembre debido a la agenda internacional de Abinader, quien asistirá a la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) esa semana.
Bajo el lema de «Unidos por la Biblia» el evento incluyó a cantantes cristianos y contó con la participación de líderes de iglesias evangélicas y católicas. El sacerdote Kelvis Acevedo y el pastor Víctor Tiburcio coincidieron en exhortar a la población a leer la Biblia y a tenerla como una guía en cada situación de la vida.
Víctor Tiburcio citó la importancia de practicar la misericordia, el perdón, la docilidad, la honestidad y las bienaventuranzas “entre quienes nos rodean”. Dijo que al leer la Biblia, en las palabras del Señor “encontramos consuelos en medios de las dificultades y desesperanza”.
Sostuvo que al leer la Biblia se entiende que la depresión es un miedo al pasado, el estrés un miedo al presente y la ansiedad miedo al futuro; y que todo problema tiene solución, cuando se aprende a ser manso de corazón y pensamiento.
Milcíades Franjul, enlace del Poder Ejecutivo con las iglesias, tuvo la participación central. En ella destacó la Biblia como “voz viva de Dios” y guía para la nación, enfatizando que la fe une y fortalece la sociedad.
«Los desafíos que enfrentamos como nación, ya sean económicos, sociales o culturales, son reales, pero más real es el poder de la Palabra de Dios para guiarnos hacia soluciones de paz, prosperidad y unidad», exclamó Franjul.
Además agradeció al presidente Abinader por su diálogo constante y por demostrar que los valores cristianos tienen un lugar importante en la vida pública a través de acciones concretas, no solo con reuniones ocasionales y exhortó a los creyentes a vivir y proclamar la Biblia con amor y valentía.
Franjul concluyó animando al presidente a mantener su liderazgo basado en la justicia y la verdad, aseguró las oraciones de la iglesia por él y por el país, y reafirmó que República Dominicana se edifica sobre la fe y puede ser un «Faro de Luz para el Caribe y el mundo» si continúa sembrando valores infundados en la fe cristiana.